No son pocas las habilidades y aptitudes que se requieren para operar estos verdaderos gigantes de los puertos que son las grúas pórtico. En esta charla con Movant Connection, Rodrigo Bravo nos cuenta detalles de su larga trayectoria con estas maquinarias en el Puerto de Valparaíso.

¿Cómo llega un trabajador a operar un grúa pórtico? ¿Cómo fue que llegaste a esa profesión?

Un día me quedé sin trabajo en un lugar donde hacía tareas administrativas y un cliente me sugirió comenzar a trabajar en el puerto y acepté.

Empecé como estibador, pero como siempre fui bien autodidacta, seguí aprendiendo y terminé cumpliendo casi 30 funciones diferentes en el puerto.

La función más avanzada que alcancé fue la de monitorear los movimientos de contenedores, asignar posiciones y distribuir la carga a almacenar en el patio, que es como llamamos en el puerto al terreno donde se depositan los contenedores.

Pero siempre me gustaron las máquinas, así que cuando surgió una postulación para trabajar en las grúas me postulé y me aceptaron.

Estuve un año en curso porque no era operador, un año emocionante y sufrido, en el que aprendí a manejar prácticamente todas las grúas que había en el muelle y luego sí empezó mi desempeño como operador, donde trabajé durante más de 12 años.

Impresiona ver el gran tamaño de las grúas, ¿cómo acceden a la cabina?

Mediante ascensores. Pero también pasa que en ocasiones no funcionan y hay que subir a pie, más de 300 peldaños, los tengo contados!

Uno se acostumbra a la altura de la cabina, que varía entre los 25 y los 40 metros, a los pesos, al tamaño.

En el ámbito del puerto, cuando estás operando, los contenedores los ves como cajas de fósforos. Pero un día me pasó, saliendo de un restaurante con mi familia, que me encontré con un camión llevando un contenedor de 40 pies y me sorprendió el tamaño, no podía creer que yo los movía con tanta normalidad. En estas ocasiones te das cuenta de la magnitud del trabajo que hace un operador, moviendo cargas que pueden llegar hasta las 34 toneladas, que es la capacidad máxima que actualmente se opera por contenedor en el puerto de Valparaíso.

Claramente la seguridad debe ser un tema fundamental...

En mi caso, si bien "normalizaba" la operación, nunca le perdí el cuidado, sobre todo porque tenés en tus manos la seguridad de personas, compañeros de trabajo.

Porque los incidentes ocurren y de hecho yo los tuve, pero solo con contenedores nunca con personas, siempre tuve mucho cuidado.

¿Cómo afectan las condiciones climáticas a estas operaciones y a tu trabajo?

En ocasiones los factores climáticos afectan, para eso las grúas vienen con sensores de viento que dan un preaviso y advierten, con una luz amarilla, que el mismo está excediendo cierta velocidad y ahí el operador debe tomar la decisión de seguir o detener la máquina. Porque cuando se llega a la luz roja la grúa se para en la posición que esté y esto puede ser peligroso.

Por otro lado, cuando un buque se mueve mucho, el operador debe calcular muy bien sus movimientos, porque sale con el contenedor entre medio de dos bloques de contenedores con un margen de alrededor de dos metros y debes salir midiendo muy bien también la velocidad.

El operador tiene también algunos recursos, como mover el contenedor de forma lateral entre medio metro y un metro, siempre muy concentrado en el movimiento del buque.

¿Cuáles son los aspectos más importantes en cuanto a la capacitación para ser operador de grúas en los puertos?

A un operador se le exige pasar por varias etapas. Primero debe manejar durante un año una grúa horquilla, luego tiene que manejar un camión, después empieza a manejar grúas más grandes hasta llegar a las pórtico, para lo que se selecciona a las personas por sus habilidades y desempeño como operador en las más chicas y, a partir de ahí, hay que ver si tiene las capacidades o aptitudes para operar esas máquinas.

¿Qué habilidades crees que son fundamentales para poder tener éxito en este trabajo?

En mi humilde juicio, concentración, coordinación y quizás también algo de sangre y corazón para operar una máquina tan grande y para tener, además, capacidad de reacción ante un momento de emergencia.

El ser humano está capacitado para hacer entre cinco y siete movimientos a la vez, depende de la persona. Un operador de helicóptero creo que hace siete cosas a la vez, y un operador de grúa pórtico generalmente hace entre cuatro o cinco acciones simultáneas y no todos tienen esa capacidad.

Habitualmente, de diez operadores que entran al curso de tres meses, generalmente aprueban tres en promedio.

¿Trabajan también en equipo?

Hay un equipo conformado por el jefe de nave, los trackistas, que son personas que van ingresando la información a sistema y se van comunicando con un operador que está abajo, que aquí se lo llama portalonero.

El operador se comunica solo con una persona que es su compañero, el portalonero, y toda la información le llega a través de el, esto es muy importante para que el operador pueda mantener la concentración.

Es importante que los dos tengan los mismos conocimientos hayan sido bien instruidos y tengan buena comunicación.

¿Cuántos contenedores se suelen mover en una hora?

La velocidad de transferencia de contenedor es algo muy relativo, porque depende de muchos factores, como el tipo de buque, las condiciones climáticas, entre otros.

Me ha pasado de embarcar solamente uno o dos contenedores por hora cuando estaba empezando, pero cuando se dan todas las condiciones, un operador experto, puede llegar a mover más de 60 contenedores por hora.

¿Te imaginas en el futuro un puerto completamente automatizado?

Hay máquinas que ya trabajan solas en puertos de otros países, según tengo entendido en Alemania utilizan camiones sin conductores para algunos movimientos.

Pero no creo que por ahora sea posible automatizar completamente las grúas pórtico de muelle, tendría que avanzar más la tecnología incluso con inteligencia artificial para reemplazar a un operador de grúas, más que nada por la gran cantidad de movimientos que continuamente se necesitan adicionalmente a lo que sería lo "normal".