"En términos de repuestos, importamos una parte significativa, especialmente para locomotoras, mientras que los repuestos para vagones son mayormente nacionales. Esto se debe a la complejidad y la disponibilidad de ciertos componentes en el mercado local e internacional".

Desde los desafíos logísticos hasta la importancia de los acuerdos comerciales, Marcelo Fabián Tumminello, comprador en Ferroexpreso Pampeano, nos adentra en el mundo del transporte ferroviario de carga en Argentina.

¿Qué es Ferroexpreso Pampeano?

Ferroexpreso Pampeano S.A.C. es una de las tres concesiones ferroviarias que operan en Argentina desde los años 90. Somos la primera concesión otorgada por el Estado Nacional en esa década, tras la disolución de Ferrocarriles Argentinos. Nos dedicamos principalmente al transporte de granos y sus derivados.

¿Cuál es la trayectoria de la empresa desde su inicio?

Comenzamos nuestras operaciones el 1 de noviembre de 1991. Desde entonces, hemos crecido hasta convertirnos en una pieza fundamental del sistema de transporte de carga en Argentina. Nuestra red abarca desde Rosario en la provincia de Santa Fe hasta el Puerto de Bahía Blanca, siendo este último nuestro principal punto de actividad.

¿Cómo funciona el proceso de transporte de carga en sus rieles?

Recogemos cargas en distintos puntos de la red, como, acopiadores, cooperativas u otros clientes, y las llevamos a su destino final, ya sea el Puerto de Rosario o el Puerto de Bahía Blanca. Además del transporte de granos y sus subproductos (aceites, fertilizantes, etc), hemos diversificado nuestras operaciones, incluyendo el transporte de tubos para la industria petrolera, entre otros.

¿Qué representa ser comprador para el transporte ferroviario?

Entré a Ferroexpreso Pampeano ni bien se concesionó, en 1991, y con el tiempo me fui perfeccionando en comprar material ferroviario, que es toda una especialidad, en definitiva, porque somos pocos los compradores ferroviarios en Argentina.

Obviamente, tampoco es imposible para otro comprador de cualquier rubro incorporarse a gestionar material ferroviario porque, en definitiva, cuando uno se va profesionalizando en las compras, el método, la manera de comprar, cómo licitar, con los detalles que puede tener cada compañía, distintos procedimientos y demás sistemas de control, es todo muy parecido.

Obviamente van a cambiar los rubros y los proveedores, así como tal vez cambien los países donde tengas que comprar bienes.

¿Trabajan con proveedores locales e internacionales?

Sí. Con ambos. Durante muchos años, sobre todo en Argentina, las empresas proveedoras de material ferroviario que se dedicaban a atender al Estado Nacional y después al Estado Provincial, terminaban siendo un poco cautivas o rehenes. El ferrocarril fue dejando de comprar o el Estado pagaba muy mal y eso fue generando que hoy no haya mucha oferta, por lo que en muchos casos obligatoriamente hay que comprar al exterior, tanto porque determinado producto no está disponible, así como también por la escala.

Las ruedas o los rieles, por ejemplo, es tanta la cantidad que habría que fabricar para hacer rentable su producción que hoy es imposible que se fabriquen en Argentina.

La inversión necesaria para poner una fábrica de ruedas sería tan grande que no sería suficiente la demanda que generarían todos los ferrocarriles del país juntos.

En cuanto a los repuestos de locomotoras, algunos se fueron "nacionalizando" pero, en general, hay que traerlos de afuera (Estados Unidos mayormente). En el caso de los vagones no tanto, porque todavía hay en Argentina empresas metalúrgicas, fundiciones o forja y centros de mecanizados para producir repuestos y poder mantener los vagones.

¿Como concesionarios realizan innovaciones además del mantenimiento?

Sí, es parte de nuestros compromisos dentro de la concesión, cuidar, mantener y mejorar el parque rodante al igual que la vía. La vía es parte de la concesión y nosotros la tenemos que cuidar, mantener y mejorar.

Si bien para las locomotoras que tienen 40 o 50 años de antigüedad todavía se consiguen todos los repuestos, hay muchas cosas que la misma tecnología, el avance de los materiales, el avance incluso de lubricantes, combustibles y demás, hace que vayamos mejorando.

Tal es el caso de las comunicaciones. Hoy nosotros sabemos exactamente por dónde van nuestros trenes, vamos hablando con los conductores, el conductor va viendo si hay algún problema a lo largo de todo el tren con muchísimos equipos de sensores, de distintos parámetros de funcionamiento y estado del motor y de los vagones. Se fue innovando mucho.

¿Cómo se manejan los desafíos logísticos y técnicos en el transporte ferroviario?

Nos esforzamos por mantener un alto estándar de servicio y seguridad. Innovamos constantemente en tecnología y mantenimiento de nuestros equipos. Además, cuidamos y mejoramos la infraestructura de nuestras vías para garantizar un servicio confiable y eficiente.

A diferencia del transporte terrestre, nuestros ferrocarriles están preparados para el transporte de grandes volúmenes. Un tren carga alrededor de 1.500 toneladas de cereal, por lo que no contamos con una gran cartera de clientes. De hecho, contamos con cinco o seis grandes que nos dan el 80 o el 90% de nuestro transporte, aproximadamente.

¿Cómo se componen las formaciones ferroviarias habituales que ponen a rodar?

Tenemos cerca de 2.500 vagones y alrededor de 58 locomotoras, las cuales forman parte de la concesión. Nuestra función es mantenerlas y, llegado el caso, devolverlas al Estado Nacional el día que termine el contrato.

Una formación cuenta con 38 a 40 vagones cargados, aunque hay trenes mucho más largos con 100 o 200 vacíos. No tenemos horarios regulares de trabajo al no transportar pasajeros. A veces, circulamos de noche para justamente entorpecer lo menos posible el tránsito.

Hoy el promedio de velocidad de un ferrocarril de cargas en Argentina está alrededor de los 20 kilómetros por hora.

¿Cuál es la visión de futuro de Ferroexpreso Pampeano?

Nuestra visión es seguir siendo líderes en el transporte ferroviario de carga en Argentina. Buscamos expandir nuestras operaciones en distintas zonas, captar nuevos clientes generando nuevos negocios y mejorar nuestra eficiencia operativa, siempre manteniendo nuestro compromiso con la calidad y la seguridad en el servicio que ofrecemos a nuestros clientes, lo que lleva a la Satisfacción del cliente.