2 de mayo de 2023
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentario de Argentina (Senasa), representa una de los denominados "terceros organismos" que participan de los procesos de importación y exportación, en este caso, controlando el tráfico de los productos y subproductos derivados de origen animal y vegetal, productos agroalimentarios, fármaco-veterinarios y agroquímicos, fertilizantes y enmiendas.
En diálogo con Movant Connection, Pablo nos cuenta detalles de su trabajo en este eslabón de gran importancia para el comercio internacional, ya que se encarga de asegurar la calidad y seguridad de muchos de los productos que el país comercializa con los mercados externos.
¿En que consiste tu trabajo en Senasa?
En mi trabajo tuve dos etapas distintas; los primeros 17 años de mi carrera los pasé inspeccionando y certificando productos vegetales en Puerto de Buenos, Aeropuerto Internacional de Ezeiza y otros puntos fronterizos del país, pero desde hace unos años pasé a trabajar en el cuartel general de Senasa, en la Dirección de Comercio Exterior Vegetal, donde el trabajo es más bien evaluativo, normativo y de análisis de riesgos, aunque periódicamente suelo viajar a países que desean exportarnos productos, o a las provincias para realizar controles de gestión (auditorías), de nuestras propias oficinas.
¿Qué formación o habilidades profesionales son elementales para desarrollar tus tareas?
En Senasa hay dos ramas o áreas bien distintas: una roja y una verde, es decir que fiscalizamos productos provenientes del mundo animal y vegetal. Yo estoy en la rama verde así que lo ideal es ser Ingeniero agrónomo o en producción agropecuaria y para la parte animal lo ideal es ser veterinario o al menos técnico.